jueves, 30 de enero de 2014

Esencialmente Pérez Siquier




ESENCIALMENTE PÉREZ SIQUIER

Innecesario se antoja a estas alturas ponderar las excelencias de la obra de Carlos Pérez Siquier, y mucho menos glosar su mas que vasto currículum, pero sí se impone disfrutar una vez más de su obra. La muestra “Pérez Siquier Esencial”, repartida en dos sedes, supone una excelente oportunidad para acercarse y conocer su trabajo. Especialmente para las nuevas generaciones de aprendices de fotógrafos, que sólo conocen la fotografía de ceros y unos, y no la de sales de plata. De deleitarse con una magnifica lección sobre el viejo oficio de mirar. Aunque se insiste en resaltar continuamente la relación de la obra de Carlos con Almería, su mirada es universal, casi telúrica, compartiendo ancestros comunes con el Federico de Bodas de Sangre y ese verso también tectónico que dice: “que yo no tengo la culpa, que la culpa es de la Tierra”, entendida ésta como planeta, no como lugar.
En el CAMA las imágenes en blanco y negro de la Chanca se nos presentan como una especie de Primal Scream o Terapia del Grito Primario, esa en la que los pacientes gritan para encontrar sus verdaderas necesidades y sentimientos en el proceso de experimentar todo su dolor. Entendido el término "dolor" como cualquier angustia emocional y a sus supuestos efectos psicológicos a largo plazo. Por desgracia, como terapia desacreditada, por mucho que John Lennon la popularizase en 1970, ésta no parece haber surtido efecto. Pues no deja de resultar llamativo lo mucho que aún se parecen esas imágenes casi setenta años después a la actualidad de ese mismo barrio, para sonrojo de la sociedad almeriense.
En el Patio de Luces de Diputación, nos encontramos ante un valiente Pérez Siquier en su salto sin red al color, incluido su pop mas salvaje.
También motivo de rubor para autoridades e instituciones puede resultar el hecho de que esta gran muestra forme parte, aún hay más, de la colección privada de Andrés García Ibáñez, perteneciendo a los fondos del Museo Casa Ibáñez, en vez exhibirse permanentemente en la sala de algún organismo oficial.
De la misma forma que Charly Rexach, ese extremo derecho de exquisita técnica del F.C. Barcelona, que desarrolló toda su carrera a escasos minutos de su casa, a Siquier le ha bastado tan sólo con un pequeño radio de acción para elaborar su discurso. A diferencia de otros grandes él no es un fotógrafo viajero necesitado de recorrer mundo en busca de nuevas emociones; si uno no es capaz de hacer buenas fotografías en su entorno nunca será un buen fotógrafo. Salvando la diferencia, claro está, entre la Barcelona y la Almería de los años 50, no es lo mismo llegar a gozar de reconocimiento universal jugando Champions que Segunda B.

Antonio Jesús García.

Publicado La Voz de Almería (30-1-14)


jueves, 23 de enero de 2014

Una Expariencia Inolvidable







UNA EXPERIENCIA INOLVIDABLE

¿Quieres sentirte cómo un miembro de la corte de Al- Mutasim, o más bien cómo un esclavo de la misma? Es muy fácil, tan sólo tienes que cargar tu mochila, equipo fotográfico y demás bártulos, encaminarte por la calle Almanzor, en plena canícula, y subir hasta La Alcazaba. Para hacer más enriquecedora la experiencia, si consigues llegar no encontrarás ni servicio de cafetería. Al parecer el horario de visita del monumento durante los meses de verano será de 10 a 17 horas. ¡Toma ya experiencia mística! No se descarta que con el vestuario sobrante de los extras de Éxodus se improvisen unas túnicas árabes o turbantes beduinos para ir más acordes con la ocasión.
Conozca nuestro patrimonio y adelgace a la vez. Podía ser un ingenioso reclamo que aunase al turismo cultural y al culturista, que en el aspecto promocional de captar turistas nunca hemos sido muy linces que digamos. Somos una ciudad que aspira a ser reclamo turístico y que cuando atracó un gran crucero tuvo que improvisar excursiones a Granada porque los bares y restaurantes de la zona centro permanecen cerrados los domingos y festivos. Ante el gran ridículo comercial, el concejal de turismo del momento comentó: “¡Es que han venido en puente!” Evidentemente, señor concejal, habían venido por eso, porque estaban de puente.
Extraña imagen la que se quiere transmitir para la celebración del Milenio de la Taifa de Almería. Curioso también escuchar que “al pillar desprevenidas a las instituciones la celebración del milenio…” ¿Qué pasa, que no saben contar o qué? Debería desconcertarnos, aunque lo tenemos ya más que asumido, que la Junta de Andalucía y resto de instituciones se volcasen con una celebración espectacular del Milenio de Granada con ingentes cantidades de dinero, incluyendo a la Diputación de Almería, que aportó no sé cuántos miles de euros, mientras aquí no sólo les coge de improviso, sino que no logran ponerse de acuerdo a la hora de aunar proyectos.
Cabe recordar que se trata de una etapa crucial y probablemente la más importante de la ciudad de Almería y de lo que hoy es su provincia con el mismo nombre. En 1014 nació el Reino de Almería como consecuencia de la desintegración del califato de Córdoba. Sin duda la época de mayor esplendor de la ciudad en la que tiene su origen la estructura del casco histórico, la muralla de Jayrán o los aljibes árabes.
Las oportunidades se pierden una tras otra, como pasó anteriormente con el cine, como pasó en el 2005, como pasa actualmente con el Milenio y como pasará en el futuro con la próxima oportunidad, sea la que sea. Lo malo no es tropezar, lo realmente dramático es encariñarse con la piedra.
Sinceramente, creo que tenemos sol porque no depende de nosotros.

Antonio Jesús García.

Publicado La Voz de Almería (23-1-14)


jueves, 16 de enero de 2014

Movida, Promovida y Desmentida.


MOVIDA, PROMOVIDA Y DESMENTIDA.

Le ha llegado el turno del revisionismo histórico a la Movida, movimiento contracultural español desarrollado desde los inicios de la Transición postfranquista hasta mediados de los ochenta.
Las ansias de libertad, tras cuarenta años de dictadura, más los ecos del punk propiciaron una especie de ciclogénesis explosiva a la que se llamó Movida. Imperaba la necesidad de crear y disfrutar de pop y rock en castellano, importando mucho más las ganas de decir cosas que el virtuosismo técnico a la hora de hacerlo. A la interminable lista de grupos musicales (La Mode, Radio Futura, Loquillo, etc.), le acompañaron aportaciones de las diferentes manifestaciones artísticas. Cineastas como Almodóvar, pintores como Pérez Villalta o El Hortelano, ilustradores como Javier de Juan, o fotógrafos como Pérez Mínguez o Miguel Trillo, son tan solo unos ejemplos.
La primera piedra de esta corriente negacionista la puso Álvarez del Manzano reduciéndola a una creación del aparato de propaganda del gobierno socialista sin ningún poso. Como si nada de ello hubiera tenido lugar, como si los discos, canciones, grupos, cómics, películas, fanzines, pintores o diseñadores nunca hubieran visto la luz. Olvidando que uno de los discos más representativos, del grupo Kaka de Luxe, se editó en 1978. Y que Radio 3, que desde sus inicios se dedica a emitir maquetas de grupos en ciernes, comienza su andadura en 1979 con Adolfo Suárez en el poder. Descartada así la conspiración judeo masónica de Felipe González y sus secuaces, ya que no ganan sus primeras elecciones hasta final del 82, que argumentaba que fue el PSOE su gran artífice. Inquietantes resultan también los argumentos revisionistas del otro lado, los que se atribuyen su gestación, como si ese torrente creador fuese posible alumbrarlo desde la mesa de un despacho de Tierno Galván o de cualquier otro político. Evidentemente éstos no perdieron la oportunidad de salir en la foto, pero no nos engañemos, exactamente igual que sigue sucediendo hoy en día. Tampoco faltan las lecturas interesadas de coetáneos a dicha movida que ahora se autoproclaman popes de la misma mientras en su momento andaban embutidos en mallas elásticas haciendo música para quinceañeras.
El recientemente desaparecido cantante Germán Coppini, interpelado en una entrevista sobre si existió la Movida, respondió que de alguna forma habría que llamarla. Indudablemente lo que no se puede hacer es negarla o atribuírsela políticamente.

Antonio Jesús García.

Publicado La Voz de Almería (16-1-14)

jueves, 9 de enero de 2014

Manolo Falces y su Plaza


MANOLO FALCES Y SU PLAZA

Paseas por la zona del parque, o te acercas al Centro Andaluz de La Fotografía a ver una de sus siempre interesantes exposiciones, y como quien no quiere la cosa te encuentras con esa extraña plaza.
Aplaudiendo, sin dudar, la idea de dedicar un espacio a Manuel Falces. Si por algo es reseñable Manolo Falces, aparte de su labor artística, es por ser el primer, o quizás mejor decir el único, personaje almeriense que pensó e ideó a lo grande para con su ciudad. Un soñador, un visionario, que al tiempo que paseaba en bicicleta por Cabo de Gata escuchando “Imagine” de John Lennon, imaginó el proyecto cultural más ambicioso e importante que se haya desarrollado nunca en nuestra ciudad, el Proyecto Imagina (1990-1992). Existen grandes ciudades como Nueva York y sitios así en los que a lo largo del tiempo numerosos y grandes artistas han trabajado en esa ciudad, pero nunca, en tan corto periodo, los fotógrafos mas importantes del mundo no solo nos visitaron sino que además crearon una obra en, por y para Almería.
Si de por sí se nos antojara escaso este legado, y como quien bien siembra bien recoge, este proyecto se convirtió en la antesala y principal baza a favor para la concesión del Centro Andaluz de La Fotografía a Almería.
Por todo ello, repito, resulta más que loable la iniciativa de dedicar un espacio a tan insigne personaje que contribuya a perpetuarlo en la memoria colectiva, pero, lo siento, no puedo dejar de experimentar tristeza al pisar esa plaza. De entrada la idea puede resultar interesante en fase de proyecto: fotos retroiluminadas por la noche en una especie de urnas fúnebres a nivel de suelo; pero en la práctica, por la noche, la suciedad acumulada junto a la condensación de vapor de agua debido a la humedad convierten en tarea imposible el poder disfrutar debidamente de la obra y, durante el día, no llama la atención, pasando desapercibida, al margen del deterioro sufrido en las mismas debido a la exposición lumínica. Sin obviar el hecho poco respetuoso de exhibir una obra a ras de suelo en una zona de tránsito. Desde la cultura paleocristiana se ha evitado la representación de imágenes en el suelo precisamente por respeto a las mismas y no mancillarlas al pisar por encima. Una persona tan vitalista y de sonora carcajada como era Manolo no merece un lugar tan triste, por muy cerca que esté de su Centro Andaluz de La Fotografía. Manolo Falces merece algo mayor, un museo que divulgue su obra, una gran avenida, o incluso cambiar el nombre al Paseo de Almería si fuera necesario, o a la Avenida de Cabo de Gata. Imagínalo, como diría Lennon, puedes decir que soy un soñador pero no soy el único.

Antonio Jesús García.

Publicado La Voz de Almería 09-01-14

Pueblos del Mundo: ¡Extinguíos!

PUEBLOS DEL MUNDO: ¡EXTINGUÍOS! La creatividad es la capacidad de generar nuevas ideas o conceptos a base de asociar entre s...