LA
CULPA DE TODO LA TIENE FERRAN ADRIÁ
Vivimos
en plena vorágine culinaria y no hay cadena televisiva que se precie
de no tener en parrilla al menos a un cocinero ataviado de una
hortera chaquetilla preferiblemente, o diario que no incluya un
completo set de cupcakes
entre las innumerables ofertas y artículos con los que camuflan el
periódico del domingo.
Lo
de los realities
ya es para nota. ¿Cuántos hay? De todo tipo además. Desde formas
esnob de decorar magdalenas hasta unas escultóricas e infumables
tartas cuyos autores son elogiados o tratados
como si fuesen el mismísimo Miguel Ángel resucitado. Lo que aún
no tengo nada claro es
si es positivo o
negativo para su formación que un niño de once años maneje los
cuchillos con más destreza que el carnicero del
súper.
Por
todos es conocida y
admirada la supremacía española en la cocina mundial, en pocos
aspectos, quizás junto al de la corrupción de nuestros políticos,
ha estado la cosa
tan clara. A ello, sin duda alguna y recogiendo el testigo de Arzak y
otros, quien más
ha contribuido con su buen hacer ha sido el chef de Hospitalet de
Llobregat Ferran Adriá. Toda revolución tiene lo que se denominan
daños colaterales y que traen consigo entre otras
cosas el uso
y abuso de
términos más o menos novedosos que terminan confundiendo al
personal, como “Gastrobar”,
una redundancia
que se podría traducir
como bareto con decoración tirando a fashion con luces indirectas,
cuya mayor aportación a la gastronomía mundial ha sido reducir
hasta la ridiculez el tamaño de las hamburguesas y untar el queso de
rulo de cabra con cebolla caramelizada o cualquier tipo de confitura
diferente a las hasta ahora únicas de melocotón y fresa.
Por
fortuna las fronteras entre disciplinas se diluyen y en 2006 al
afamado cocinero del Bulli se le concede el prestigioso Premio Luky
Strike de Diseño,
galardón otorgado hasta
esa edición a artistas
plásticos. Agarrada
a la ola de este tsunami culinario llega al claustro de la Escuela de
Arte la muestra “Tacones
y Fogones”,
donde la moda y la
gastronomía se dan la mano en
un peculiar maridaje que incorpora,
además,
aportaciones de otras disciplinas artísticas como fotografía,
diseño gráfico o cerámica.
Si
Def Con Dos, grupo de música caracterizado por su mezcla de rap y
rock, en 1995
y perteneciente a su
álbum Alzheimer
popularizaba el tema “La
Culpa de Todo La Tiene Yoko Ono”;
en cocina podríamos
decir que, tanto para bien como para mal,
la culpa de todo la tiene Ferran Adriá. Sin negar, al menos en el
aspecto televisivo, la gran ayuda de Chef Ramsay y sus increíbles
frases del tipo:
“esta
comida tiene tanto aceite que Estados Unidos está tratando de
invadir el plato”.
Antonio
Jesús García.
Publicado
La Voz de Almería (13-2-14)
Pues q quieres q te diga....... prefiero las lentejas con chorizo!
ResponderEliminarjeje..... y esa foto se puede mejorar, eh!? ;)
ResponderEliminarQ hay más sombra q melocotón!!