LA MODA Y EL EFECTO MARIPOSA
Se
conoce como Efecto Mariposa a un concepto de la Teoría del Caos, donde la más
pequeña variación, en las condiciones iniciales de un sistema, puede implicar,
mediante un proceso de amplificación, grandes diferencias en el comportamiento
futuro. Similar al efecto dominó, donde, al dar un leve
empujón a la ficha inicial de una larga hilera, logrando que todas las fichas
terminen cayendo por el efecto en cadena provocado.
El término
se ha extendido de tal forma que ya forma parte de la cultura popular, siendo
numerosos los ensayos, artículos,
películas o novelas que lo utilizan como punto de partida. Como El Ruido Eterno, de Ray Bradbury, donde
unos cazadores viajan en el tiempo hasta llegar a la Prehistoria, matando una
mariposa sin darse cuenta, y cuando vuelven al presente se encuentran un mundo que
es totalmente diferente al que conocían en un principio; o la película española
El efecto mariposa de Fernando
Colomo, donde, desde el género de la comedia, se relatan las aventuras de un
joven enamorado de la Teoría del Caos y sus consecuencias en las relaciones
personales; también se
alude al efecto mariposa en Los crímenes de Oxford, donde un simple comentario
desemboca en una cadena de crímenes.
Esta
interrelación causa-efecto se da en todos los eventos de la vida y no solo en
cuestiones aparentemente profundas y sesudas. La moda, como es óbice, no es
ajena a ello. Y no nos referimos a Valentino y sus espectaculares estampados de
lepidópteros, pertenecientes a su colección Otoño 2014, lucidos por multitud de
celebridades.
En Hawaii,
en los años 40, se instauró la costumbre del Aloha Friday, por el cual los
trabajadores podían vestir camisas hawaianas. Esas fantásticas prendas,
influenciadas por la pintura japonesa y los kimonos, y que han lucido desde el
presidente Eisenhover a Elvis Presley. Naciendo así el denominado estilo Casual, de ropa informal, siendo el problema su, muchas
veces, desastrosa aplicación.
O la moda
de los pantalones caídos, los shaggy-pants,
originada entre los reclusos tras la prohibición de utilizar cinturones
en las cárceles americanas, los cuales, al salir del trullo, decidieron seguir
llevándolos de igual manera para reafirmar su condición de tipos duros. El auge, en esa época, de la cultura hip-hop, propició su extensión primero
entre la comunidad negra y de ahí al resto del mundo.
Conclusión:
gracias a que unos señores decidieron ir a trabajar en manga corta Dani Alves se viste de esa guisa;
y, como hace treinta
años prohibieron usar correa a unos choros, la juventud va enseñando la
rabadilla por la calle.
Aunque para efecto mariposa el que puede provocar Syriza
en el resto de Europa.
Antonio Jesús García
Publicado La Voz de Almería (19-2-15)
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