jueves, 12 de octubre de 2017

La Muvaise Réputation



LA MAUVAISE RÉPUTATION

Cuando la fiesta nacional yo me quedo en la cama igual, que la música militar nunca me supo levantar.

Traducida al castellano como La mala reputación, versionada por Loquillo e incluida en su álbum Morir en primavera, fue traducida por primera vez y popularizada durante la dictadura por Paco Ibáñez. La muvaise réputation,  tema del anarquista trovador francés Georges Brassens, puede considerarse un alegato frente al conformismo que parece invadir a la sociedad actual. Arremetiendo especialmente contra esa especie de Hidra de tres cabezas formada por el nacionalismo: en el mundo pues no hay mayor pecado que el de no seguir al abanderado, la religión: a la gente no gusta que uno tenga su propia fe; y la división de clases: zancadilla doy al señor y aplastado el perseguidor.

Algún lumbreras ha debido pensar que la mejor forma de afrontar el disparate nacionalista catalán es con el disparate nacionalista español. Es ver tantas banderas y uno no puede dejar de imaginarse a Miguel y Antonio Alcántara en su cooperativa Estandartes y  Banderas durante la serie Cuéntame cómo pasó.

Especialmente patética ha resultado la intervención de Mario Vargas Llosa en la manifestación por la unidad de España: La pasión puede ser destructiva y feroz cuando la mueven el fanatismo y el racismo. La peor de todas, la que ha causado más estragos en la historia, es la pasión nacionalista.

La frase que por si misma no pasaría de ser digna de figurar en un sobrecito de azúcar, resulta especialmente ridícula en el contexto: desacreditar al nacionalismo ante miles de personas exhibiendo la bandera nacional.

En teoría la rojigualda es la bandera que representa a todos los españoles pero la realidad es bien distinta. La sistemática apropiación y uso excluyente del estandarte nacional por parte de un amplio sector de la derecha española, junto a, también hay que decirlo, una inhibición por parte de la izquierda, ha propiciado que un espectro de la sociedad no se sienta identificado con la misma. No hay que olvidar que esta misma bandera que hoy se usa como insignia de la unidad nacional, es la misma que se enarboló en contra del aborto y la misma que se agitó en contra del matrimonio gay. Por eso hay quien cree que una bandera que se usa de manera excluyente y en contra los derechos de otras  personas  no puede ser representativa de todos.

Si alguna conclusión clara se puede extraer este año de la celebración del día de la Fiesta Nacional es que alguien se está forrando vendiendo banderas.

Eso sí que sí que será una lata, siempre tengo yo que meter la pata.



Antonio Jesús García


Publicado La Voz de Almería (12.10-17)


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Pueblos del Mundo: ¡Extinguíos!

PUEBLOS DEL MUNDO: ¡EXTINGUÍOS! La creatividad es la capacidad de generar nuevas ideas o conceptos a base de asociar entre s...